La última noticia en el mundo de los vehículos autónomos llega desde California, donde el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) ha suspendido los permisos de despliegue y pruebas de vehículos autónomos de Cruise este martes, después de determinar que los vehículos de la compañía “no son seguros para las operaciones públicas”.
La decisión se produce después de incidentes de alto perfil en los que los vehículos de Cruise interfirieron con servicios de emergencia y estuvieron involucrados en dos colisiones relacionadas con peatones en los últimos meses, esta última siendo objeto de una investigación federal reciente.
Los funcionarios del DMV afirmaron el martes que la suspensión se basó en el rendimiento de los vehículos. Además, citaron una disposición regulatoria que establecía que los permisos podían suspenderse si un “fabricante ha tergiversado cualquier información relacionada con la seguridad de la tecnología autónoma” al explicar su decisión.
Cruise, una empresa de General Motors, ha estado llevando a cabo operaciones comerciales sin conductor en San Francisco desde junio de 2022. Hace apenas dos meses, otra entidad reguladora, la Comisión de Servicios Públicos de California, votó 3-1 a favor de permitir a la compañía expandir estas operaciones sin conductor.
En respuesta a la suspensión, Cruise anunció que cumplirá con la medida y pausará sus operaciones sin conductor en San Francisco.
Hannah Lindow, portavoz de la compañía, indicó que la suspensión está relacionada con un accidente ocurrido este mes en el que un vehículo de Cruise chocó y se detuvo encima de un peatón, después de que la víctima fuera golpeada primero por otro automóvil y lanzada hacia el camino del Cruise.
Cruise todavía puede operar vehículos en San Francisco, siempre y cuando un conductor de seguridad humano esté detrás del volante.
Esta suspensión representa un fuerte revés para una empresa que ha fijado su mirada en un ambicioso plan de expansión que abarca ubicaciones nacionales y globales. Justo la semana pasada, Cruise presentó planes para lanzar un servicio de robotaxi en Tokio, en colaboración con Honda.
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