Kenjiro Shinozuka, reconocido por sus históricas victorias tanto en el Campeonato Mundial de Rally (WRC) como en el desafiante Rally Dakar, ha fallecido a los 75 años. Nacido en Tokio, Shinozuka se convirtió en un ícono del deporte motor, destacando por ser el primer piloto japonés en alcanzar la gloria en las dos competiciones más exigentes del rally mundial.
Shinozuka inició su carrera en el WRC en 1976, marcando una era dorada como piloto de fábrica para Mitsubishi. Su mayor éxito llegó en 1988, cuando, junto a su copiloto Fred Gocentas, se adjudicó el primer campeonato Asia-Pacífico, logrando una victoria en el Rally del Himalaya al volante de un Mitsubishi Galant VR-4.
Sin embargo, fue en 1991 cuando Shinozuka y su copiloto John Meadows dejaron una marca indeleble en el WRC, conquistando la ronda de Costa de Marfil con una ventaja superior a las dos horas sobre el segundo clasificado, también piloto de Mitsubishi, Patrick Tauziac. Esta victoria no solo fue un importante en los palmares de Shinozuka sino que también representó la primera victoria de un piloto japonés en el WRC.
En el Dakar, Shinozuka demostró su versatilidad y resistencia, logrando su primer podio en 1987. A lo largo de los años, se mantuvo como una figura destacada en el rally más duro del mundo, alcanzando la cima en 1997 al volante de un Mitsubishi Pajero, convirtiéndose en el primer piloto japonés en ganar este rally. Además de su victoria, Shinozuka cosechó varios podios, incluidos un segundo lugar en 1998 y un tercer puesto en 2002, demostrando su habilidad y determinación en las condiciones más extremas.
La carrera de Shinozuka también estuvo marcada por la adversidad, especialmente en 2003, cuando sufrió un grave accidente en el Dakar que lo dejó en coma. A pesar de la gravedad de sus lesiones, Shinozuka mostró una fuerza de voluntad extraordinaria al regresar al Dakar el año siguiente, concluyendo su participación final en la competencia en 2007.
Su contribución al automovilismo fue reconocida en 2022 con su inclusión en el Salón de la Fama del Automóvil Japonés, y en su último año, Shinozuka desempeñó un papel crucial en el equipo de seguridad del WRC en el Rally de Japón, demostrando su compromiso continuo con el deporte.
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