Las crisis causada por Coivd-19 a afectado de manera importante la economía global, y la industria automotriz no ha sido ajena a la situación económica y social del momento.
En una presentación del balance anual, el Presidente de Suzuki Motor Ibérica, Juan López Frade, dejó en evidencia los efectos que ha tenido la crisis sanitaria sobre la marca japonesa no solo en España, sino también a nivel global.
Hasta Octubre del 2020, la industria automotriz sufre un descenso mundial del 17% y siendo optimistas, en 2021, si la pandemia comienza a ceder y se hacen un poco bien las cosas, lo lógico es que se podría recuperar el mercado un 10%. Las ventas de Suzuki en el mundo también se han recibido un impacto importante. Ya en 2019 hubo una caída muy significativa del 13.1% y la previsión es que en este 2020 el descenso sea un 16.2%, pasando de los 3,264,000 autos vendidos en 2018, a 2,378,000 en 2020. En Europa, por su parte, las ventas de Suzuki siguen en retroceso desde 2018, aquel año solo fue un 1%, pero marcó una tendencia, cerrando el 2019 con una caída del 5,8 % y forzado por la pandemia un 15,6 % a la fecha en este 2020.
Suzuki ha trabajo en electrificar toda su gama en Europa con sistemas Mild Hybrid
La caída en ventas de Suzuki viene de antes de la pandemia, principalmente por la presiones de la Unión Europea para reducir las emisiones vehículares para los fabricantes de automóviles. En 2020 se implanta el CAFE por su siglas en inglés “Clean Air For Europe”, que de forma escalonada, entre 2020 y 2030, exige una progresiva reducción de las emisiones que en 2025 llegará a un 15% adicional y en 2030 a un 37,5%.
La norma ha sido especialmente difícil de aplicar para Suzuki. A esto se suman de forma paralela el GSR o General Safety Regulations, por el cual los fabricantes se ven obligados a equipar los vehículos con una serie de sistemas de seguridad avanzados, como ADAS, o bloqueo en caso de consumo de alcohol por el conductor, la alerta de control de sueño, etc. tecnología que para marcas como Suzuki se ha vuelto difícil desarrollar e implementar por su alto costo.
Para mitigar este problema, Suzuki a armado estrategias como el acuerdo global con Toyota, aprovechando algunas de sus plataformas híbridas para comercializarlas en Europa, como el Toyota Rav4 que se comercializa como Suzuki ACross. Además Suzuki esta en un proceso de electrificación de su gama.
Toda la gama Suzuki ya está hibridada como el Ignis, Swift, Swift Sport, Vitara y S-Cross con el sistema Mild Hybrid en 12 o 48V. El Jimny, un auto que alcanzó un importante volumen de ventas en Europa, sufrió un revés por su incapacidad de cumplir con las normas de emisiones y que Suzuki ha tenido que comercializar como una variante N1 o como vehículo industrial. Cosas que pasan y que son difíciles de entender, como vehículo particular es contaminante pero como industrial no.
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