Porsche anunció que suspenderá la producción en su planta de Leipzig hasta fines de la próxima semana como resultado de la crisis de Ucrania, según señaló este miércoles un portavoz del fabricante, de igual forma agregó que la producción en Zuffenhausen continuaría sin cambios por el momento.
El Grupo Volkswagen había señalado un día antes sobre los recortes de producción en algunas de sus plantas, incluida la de Wolfsburg, ya que los proveedores con sede en Ucrania han tenido dificultades para entregar después de la invasión de Rusia.
Esta vez el problema es la producción reside en el cableado para los vehículos. Un arnés de cables es un conjunto vital que agrupa ordenadamente hasta 5 kilómetros de cables eléctricos y de datos en un automóvil moderno. Cada arnés es único para cada modelo y cambiar de proveedor no es tarea fácil.
La invasión de Ucrania ha afectado a proveedores como Leoni, Fujikura y Nexans, y se extendió a los principales fabricantes de automóviles. Proveedores como Leoni, que tiene dos fábricas de cableado en el oeste de Ucrania, se esfuerzan por compensar las pérdidas de producción y las interrupciones en las plantas en Stryi y Kolomyja, provocadas por la agresión rusa.
El panorama no es claro, pero Porsche y su filial, el Grupo Volkswagen no son los únicos afectados, por lo que es probable que veamos otras detenciones en las líneas de producción europeas.
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