Las autoridades bancarias recordaron esta semana que el plazo para beneficiarse con el plan de alivio financiero vence este 30 de septiembre, periodo que se habilitó para que los clientes puedan renegociar sus préstamos con los bancos.
Amauri Castillo, de la Superintendencia de Bancos confirmó a un diario local que no hay planes para extender el plazo, aunque dijo que los bancos pueden conceder periodos de gracia adicionales a los clientes que acudan a los bancos.
Pedro Acosta, de la Unión de Consumidores y Usuarios de la República de Panamá puso en duda el “alivio” en favor de los clientes y, dijo, que solo favorece a los bancos. “Los supuestos beneficios castigan a los consumidores que al final van a pagar durante más tiempo sus préstamos”, resaltó Acosta.
Los problemas para aquellos que no se presenten incluyen dificultades de acceso a crédito a futuro, tener malas referencias de créditos o sufrir procesos de ejecución. El plan de alivio financiero no es una exoneración de la deuda ni de los intereses generados.
Como parte del plan regulado por la Superintendencia de Bancos los usuarios han podido reestructurar sus préstamos según su capacidad, ajustando sus pagos quedando todavía 400 mil préstamos con un saldo de 14 mil millones de dólares pendientes de reestructuración, según la entidad que dio declaraciones a “La Prensa”.
“En el caso de los préstamos de automóviles los trámites para ejecutar los préstamos son más ágiles por la forma cómo se estructuran estos préstamos”, dijo el superintendente Castillo.
Una de las alternativas que tendrían los bancos para cobrar la morosidad pendiente está el débito de cuentas de ahorro que mantenga el cliente en la entidad.
Para la negociación con los bancos los interesados deben contar con una carta de su empresas para lograr lograr ajustes en sus mensualidades por un periodo específico, rebajas temporales en las tasas de interés, una extensión del plazo del préstamo o una última cuota más elevada.
El saldo en préstamos de autos a julio es de mil 741 millones de dólares, siendo los principales bancos BAC ($319.4 millones), Global Bank ($241.1 millones), General ($225.7 millones), Banistmo (164.6 millones), Banisi ($127.7 millones), entre otros.
Es importante comunicarse con sus bancos porque, de lo contrario, las instituciones no tienen otra forma de constatar que el cliente sigue estando afectado por la crisis.
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