La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) ha iniciado una investigación sobre los modelos Tesla Model Y fabricados durante 2023 debido a posibles fallas en la sujeción del timón mientras se conduce. Se han reportado dos incidentes en los que el timón se ha desprendido poco después de la entrega del vehículo.
Ambos Model Y de los que se tiene reporte, no tenían instalado el perno de retención que sujeta el timón a la columna de dirección. El ajuste de fricción entre el timón y la columna de dirección fue lo único que mantuvo el volante en su lugar, lo que llevó a su desprendimiento al aplicarse una fuerza significativa en la dirección hacia el conductor.
La investigación preliminar se centrará específicamente en los modelos Model Y del año 2023, y la NHTSA sugiere que el número de vehículos investigados es de aproximadamente 120,089 unidades.
Los Model Y afectados también habían sido sometidos a una reparación al final de la línea de ensamblaje que involucraba la eliminación y reinstalación del volante, lo que llevó a la investigación de la NHTSA para determinar el alcance y la frecuencia de este problema.
Si se considera necesario después de la investigación, la NHTSA podría ordenar un retiro y correción de los productos afectados.
La seguridad vial es una prioridad para la NHTSA y cualquier posible riesgo para la seguridad será investigado para prevenir futuros incidentes. Los propietarios de un Model Y 2023 deben estar atentos a cualquier problema con el volante y llevar su vehículo a un concesionario de Tesla para su revisión completa.
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